Psicólogo Clínico - Psicoterapeuta
Miembro fundador de la Sociedad Ecuatoriana de Geriatría y Gerontología
Núcleo del Guayas
El ser humano es una unidad biopsicosocial una y diversa, producto de la dialéctica de la naturaleza, la dialéctica de las estructuras sociales y la dialéctica de la individualidad como proceso de relación social mediado por la cultura, actividad productiva y su situación social de desarrollo.
El ser humano, es producto de estas dialécticas que en sus relaciones construyen su existencia y vida en un marco activo productivo holístico, histórico cultural que posibilitan modos de vida que permiten obtener bienes materiales y espirituales para su existencia, convivencia social y estilo de vida.
El ser humano viejo es una persona individual, única y diversa, por lo tanto, diferente, especial, irrepetible, portadora de una historia de vida personal y social, receptora, depositaria y productora de cultura, por ello conviene hablar “del viejo” y no de los viejos” en general, lo que permite comprender que cada ser humano tiene sus propias particularidades y especificidades.
El ciclo vital en los humanos es un proceso muy complejo que requiere el estudio de los cambios del comportamiento, la conducta y la personalidad, debido a los múltiples factores biológicos, psicológicos, sociales, económicos y ambientales, que interactúan en el desarrollo humano y las actividades productivas en las que se encuentran inmersos, a través de los años, los cuales definen un tipo de desarrollo único para cada individuo.
El conocimiento del desarrollo humano en cada una de las edades nos permite en un momento dado o en cualquier edad, saber si un individuo da señales de salud o enfermedad, de normalidad o anormalidad, de declive y deterioro en su proceso de vida.
Los teóricos del desarrollo no han profundizado suficientemente la etapa de la ancianidad, y generalmente se la ha venido presentando solo como un período de involución determinada por pérdidas o trastornos de los sistemas sensorio-motrices, y no como declive de los procesos propios del ciclo vital humano.
El envejecimiento es un proceso progresivo, intrínseco y universal, que con el tiempo ocurre en todo ser vivo. Es el resultado de la interacción de la genética del individuo, el medio ambiente y lo histórico cultural. Se caracteriza por los cambios que denotan el declive, las alteraciones que se producen en un organismo con el paso del tiempo, y conducen a la disminución y pérdida funcional hasta llegar a la muerte.
La vejez es la etapa del ciclo vital, determinada por el proceso diferencial de cambios graduales, en el que intervienen un número considerable de variables con diferentes efectos, que da como resultado una serie de características diferenciales muy acusadas de la misma edad cronológica.
La gerontología es el estudio, desde varias disciplinas, de los fenómenos del envejecimiento humano. Su objetivo desde lo cuantitativo intenta la prolongación de la vida, dando más años a la vida y retrasando la muerte, y desde lo cualitativo mejorar la calidad de vida de ancianas y ancianos, dando más vida a los años.
La gerontología se ha ido configurando en varios tipos, entre los que tenemos:
— Gerontología biológica: Prevención farmacológica, dietética, higiénica y psicológica
— Gerontología Clínica o Geriatría: Estudio de las enfermedades de la vejez
— Gerontopsiquiatría: Nace del tronco común de la Medicina y especialmente de la Psiquiatría y contempla los trastornos propios de la vejez
— Psicogeriatría: Estudio de las enfermedades, trastornos y problemas psíquicos en la vejez.
— Psicogerontología: Estudio del el psiquismo humano sano y enfermo en las últimas etapas del ciclo vital
— Gerontología Social: Tiene como objeto el estudio multi-inter-transdisciplinario, sistemático de los procesos del envejecimiento humano individual y de las poblaciones; la acción social, los grupos, organizaciones e instituciones que conforman la estructura social de cualquier tipo de sociedad; los cambios y los efectos en el comportamiento, la conducta, la personalidad, de los adultos mayores en la interacción social y cultural.
PSICOGERONTOLOGÍA
La Psicogerontología es una rama especial de Psicología Evolutiva o del Desarrollo Humano, la Psicología de la Salud y parte de la Gerontología, su objeto de estudio es el psiquismo humano sano y enfermo en las últimas etapas del ciclo vital, siendo su campo de acción la psicología del envejecimiento individual y colectivo de los seres humanos, los cambios psicológicos y sociales, vinculados con la vejez. Por lo que siempre hay que tener en cuenta que la aproximación teórica y práctica de la psicogerontología es bio-psico-social, multi-inter-transdisciplinaria e histórica socio cultural.
Munnichs, (1966) definió a la psicogerontología como un conjunto de aportaciones tanto teóricas como prácticas de diversas áreas de la psicología al proceso de envejecimiento, para Richard y Munafo (1993) es la ciencia que trata de describir, explicar, comprender y modificar las actitudes del sujeto que envejece. Esta visión hace referencia a los aspectos psicológicos de la persona de edad, más que a los psiquiátricos. También Dosíl Maceira (1996) defienden la concepción de la psicogerontología como psicología de la vejez.
Según la Declaración de Buenos Aires, en el marco del Primer Congreso Iberoamericano de Psicogerontología (2005), se debe incluir la perspectiva de las personas involucradas, teniendo presente la necesidad de contener en el estudio de la dimensión subjetiva, las relaciones productivas, sociales e institucionales, como constitutivas de la misma.
La Psicogerontología es por definición un espacio de encuentro interdisciplinario, de confluencia de teorías y saberes convocados por su objeto de estudio e intervención y no por las disciplinas individuales, abierta a los nuevos descubrimientos teóricos y técnicos a que nos enfrentan los fenómenos de producción, de subjetividad y de sentido, asumiendo el envejecimiento y la vejez como un complejo proceso multicausal, multidimensional, multifactorial, multifuncional, multidireccional de ganancias y pérdidas, que no puede comprenderse si no se incluye en su abordaje la dimensión subjetiva e histórica.
Psicogerontología a mi criterio es uno de los posibles referentes para reconceptualizar modos y estilos de vida, comportamiento, conducta y personalidad de personas sanas o enfermas durante el proceso de envejecimiento y la vejez, de estilos de pensamientos, de políticas de intervención en la promoción y prevención de la salud, el diagnóstico y el tratamiento, la calidad de vida, el bienestar, la investigación, el debate científico y nuevos espacios de trabajo.
Bibliografía
ANDRADE, Fabre Franklin. Tesis de maestría. Mercado objetivo para la formación de Magistrys en Gerontología Social y una propuesta de un programa de postgrado. Guayaquil, 2006.
ANDRADE, Fabre Franklin. Revista de la Universidad de Guayaquil. Psicología, Estructura y Psiquismo. Imprenta de la Universidad de Guayaquil. Guayaquil, septiembre 1984.
BELSKY, Janet K. Psicología del Envejecimiento. Teoría, investigaciones, e intervenciones. Editorial Masson. Madrid, 1996.
CRUZ, Rolando Dr. Aquiles. Psicología Gerontológica y Geriátrica. Editorial Científico- Técnica. La Habana, 1996. Pág. 11.
RED, Cubana de Gerontología y Geriatría. Cátedras Universitarias del Adulto Mayor. Bases Teóricas. Gericuba. Publicación en la Web:http://www.sld.cu/sitios/gericuba/temas. Cuba 1999.
La Copia Total o parcial de artículo para su uso en otros sitios o trabajos, se debe realizar bajo la previa autorización del autor del Blog y estableciendo las respectivas referencias bibliográficas.
www.franklinandradefabre.blogspot.com
El ser humano, es producto de estas dialécticas que en sus relaciones construyen su existencia y vida en un marco activo productivo holístico, histórico cultural que posibilitan modos de vida que permiten obtener bienes materiales y espirituales para su existencia, convivencia social y estilo de vida.
El ser humano viejo es una persona individual, única y diversa, por lo tanto, diferente, especial, irrepetible, portadora de una historia de vida personal y social, receptora, depositaria y productora de cultura, por ello conviene hablar “del viejo” y no de los viejos” en general, lo que permite comprender que cada ser humano tiene sus propias particularidades y especificidades.
El conocimiento del desarrollo humano en cada una de las edades nos permite en un momento dado o en cualquier edad, saber si un individuo da señales de salud o enfermedad, de normalidad o anormalidad, de declive y deterioro en su proceso de vida.
Los teóricos del desarrollo no han profundizado suficientemente la etapa de la ancianidad, y generalmente se la ha venido presentando solo como un período de involución determinada por pérdidas o trastornos de los sistemas sensorio-motrices, y no como declive de los procesos propios del ciclo vital humano.
El envejecimiento es un proceso progresivo, intrínseco y universal, que con el tiempo ocurre en todo ser vivo. Es el resultado de la interacción de la genética del individuo, el medio ambiente y lo histórico cultural. Se caracteriza por los cambios que denotan el declive, las alteraciones que se producen en un organismo con el paso del tiempo, y conducen a la disminución y pérdida funcional hasta llegar a la muerte.
La vejez es la etapa del ciclo vital, determinada por el proceso diferencial de cambios graduales, en el que intervienen un número considerable de variables con diferentes efectos, que da como resultado una serie de características diferenciales muy acusadas de la misma edad cronológica.
La gerontología es el estudio, desde varias disciplinas, de los fenómenos del envejecimiento humano. Su objetivo desde lo cuantitativo intenta la prolongación de la vida, dando más años a la vida y retrasando la muerte, y desde lo cualitativo mejorar la calidad de vida de ancianas y ancianos, dando más vida a los años.
La gerontología se ha ido configurando en varios tipos, entre los que tenemos:
— Gerontología biológica: Prevención farmacológica, dietética, higiénica y psicológica
— Gerontología Clínica o Geriatría: Estudio de las enfermedades de la vejez
— Gerontopsiquiatría: Nace del tronco común de la Medicina y especialmente de la Psiquiatría y contempla los trastornos propios de la vejez
— Psicogeriatría: Estudio de las enfermedades, trastornos y problemas psíquicos en la vejez.
— Psicogerontología: Estudio del el psiquismo humano sano y enfermo en las últimas etapas del ciclo vital
— Gerontología Social: Tiene como objeto el estudio multi-inter-transdisciplinario, sistemático de los procesos del envejecimiento humano individual y de las poblaciones; la acción social, los grupos, organizaciones e instituciones que conforman la estructura social de cualquier tipo de sociedad; los cambios y los efectos en el comportamiento, la conducta, la personalidad, de los adultos mayores en la interacción social y cultural.
PSICOGERONTOLOGÍA
La Psicogerontología es una rama especial de Psicología Evolutiva o del Desarrollo Humano, la Psicología de la Salud y parte de la Gerontología, su objeto de estudio es el psiquismo humano sano y enfermo en las últimas etapas del ciclo vital, siendo su campo de acción la psicología del envejecimiento individual y colectivo de los seres humanos, los cambios psicológicos y sociales, vinculados con la vejez. Por lo que siempre hay que tener en cuenta que la aproximación teórica y práctica de la psicogerontología es bio-psico-social, multi-inter-transdisciplinaria e histórica socio cultural.
Munnichs, (1966) definió a la psicogerontología como un conjunto de aportaciones tanto teóricas como prácticas de diversas áreas de la psicología al proceso de envejecimiento, para Richard y Munafo (1993) es la ciencia que trata de describir, explicar, comprender y modificar las actitudes del sujeto que envejece. Esta visión hace referencia a los aspectos psicológicos de la persona de edad, más que a los psiquiátricos. También Dosíl Maceira (1996) defienden la concepción de la psicogerontología como psicología de la vejez.
Según la Declaración de Buenos Aires, en el marco del Primer Congreso Iberoamericano de Psicogerontología (2005), se debe incluir la perspectiva de las personas involucradas, teniendo presente la necesidad de contener en el estudio de la dimensión subjetiva, las relaciones productivas, sociales e institucionales, como constitutivas de la misma.
La Psicogerontología es por definición un espacio de encuentro interdisciplinario, de confluencia de teorías y saberes convocados por su objeto de estudio e intervención y no por las disciplinas individuales, abierta a los nuevos descubrimientos teóricos y técnicos a que nos enfrentan los fenómenos de producción, de subjetividad y de sentido, asumiendo el envejecimiento y la vejez como un complejo proceso multicausal, multidimensional, multifactorial, multifuncional, multidireccional de ganancias y pérdidas, que no puede comprenderse si no se incluye en su abordaje la dimensión subjetiva e histórica.
Psicogerontología a mi criterio es uno de los posibles referentes para reconceptualizar modos y estilos de vida, comportamiento, conducta y personalidad de personas sanas o enfermas durante el proceso de envejecimiento y la vejez, de estilos de pensamientos, de políticas de intervención en la promoción y prevención de la salud, el diagnóstico y el tratamiento, la calidad de vida, el bienestar, la investigación, el debate científico y nuevos espacios de trabajo.
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Autor.: Psic. Clín. Franklin Andrade Fabre
Ponente.: Conferenciante en el Primer Congreso Iberoamericano de Psicología del Deporte.
Tema: Síntesis Histórica de la Psicología del Deporte en Ecuador.
Lugar.: Campus ITESO / Guadalajara, Jalisco, México
Fecha.: 12 - 16 de Septiembre del 2006
Correo.: andradefabre@gmail.com
Este
trabajo es producto de la investigación histórica de la realidad de la
psicología de la actividad física el ejercicio y el deporte en el Ecuador, para
ello hemos recurrido a fuentes primarias y secundarias para la reconstrucción
de la misma. En nuestro país se tiene referencia del interés de la Psicología de la Actividad Física ,
el Ejercicio y el Deporte desde fines de la década del 60 e inició de la década
del 70 del siglo pasado.
Según testimonio del Licenciado Oswaldo Salazar, él
participó el 2 de Enero de 1970 en un Curso y Congreso Sudamericano de
Psicología del Deporte en Antofagasta - Chile
estando Ferrucho Antonellie de
presidente del mismo, de esta participación, surgió la idea de organizar
a los psicólogos interesados en la psicología del deporte, es así que el 27 de
Febrero de 1970 en la ciudad de Quito, capital del Ecuador, se constituye el directorio de la Sociedad Ecuatoriana
de Psicología del Deporte integrada de la siguiente manera:
Licenciado
Oswaldo Salazar, Presidente hasta la actualidad, Vicepresidente Dr. Bruno
Stornaiolo, Secretario Dr. Franklin Peñaherrera, Tesorera Licenciada Bolivia
Silva, Dr. Germán Cifuentes, Primer Vocal; Dr. Vicente Arevalo, Segundo Vocal;
Dr. Víctor Hugo Araujo, Tercer Vocal y participando como socios fundadores alrededor
de 27 profesionales.
En
1972 se realizó el Primer Curso Nacional de Psicología Aplicada al Deporte con
duración de cinco meses organizado por la Sociedad Ecuatoriana
de Psicología del Deporte y la
Facultad de Filosofía de la Universidad Central
de Quito la misma que otorgó el aval; y en el que según nos informó el
Licenciado Oswaldo Salazar participaron 104 personas.
En
1974 se incluyó la cátedra de Psicología del Deporte en la carrera de Cultura
Física en la Universidad
Nacional de Loja y en 1977, el Dr. Bruno Stornaiolo
Vicepresidente de la
Sociedad Ecuatoriana de Psicología del Deporte viaja a Sao
Paulo y Puerto Alegre - Brasil como psicólogo del equipo de fútbol del Club
Nacional a unos encuentros con equipos de Corinthias y Puerto Alegre.
En
1978, se realizaron las Primeras Jornadas de Psicología del Deporte en Ambato, a esa fecha se creo el Capítulo Central de la Sociedad Ecuatoriana
de Psicología del Deporte siendo Presidente hasta la actualidad el Licenciado
Gonzalo Vásquez, vale indicar que en Ambato según testimonio del Licenciado Vásquez
se han realizado cinco Jornadas de Psicología del Deporte.
En
1981 en Cuenca se realizó un Curso de Psicología del Deporte, se edita un libro
y se organiza también un Capitulo de la Sociedad de Psicología del Deporte siendo el
Presidente el Licenciado Abdilón Arciniegas. También el Dr. Bruno Stornaiolo
escribe el libro titulado Elementos de Psicología del Deporte,
el mismo que fue publicado por la Dirección Nacional de Deporte y Recreación
(DINADER), en el Gobierno del Presidente Abogado Jaime Roldós Aguilera siendo
el Director de DINADER el Ing. Jaime Muñoz Campusano, el tiraje del libro fue
de mil ejemplares.
En
1983, se constituyó en Quito el Capitulo Norte de la Sociedad de Psicología
del Deporte, siendo Presidente el Dr. Bruno Stornailo; se realizó el Primer
Congreso y Seminario de Psicología del Deporte en la capital; además, se resalta en este año la
participación destacada de la
Dra. Vilma Garrido en la
Dirección Nacional de Deporte y Recreación
(DINADER-Quito). En Guayaquil con el aval del Colegio de Psicólogos Clínicos
del Guayas, por una parte, y por otra la Sociedad Ecuatoriana
de Psicología del Deporte, se da lugar a la
creación de la
Sociedad Ecuatoriana de Psicología del Deporte Capitulo
Guayas, siendo electo Presidente el Psicólogo Clínico Ricardo Piña.
En
el mismo año, el Comité Olímpico incorporó la participación de Psicólogos
Clínicos interesados en la
Psicología del Deporte a la Academia Olímpica
del Ecuador, estando de Presidente del COE el Dr. Sabino Hernández. Luego desde
1990 se incorporó hasta 1995
a un psicólogo clínico dedicado a la Psicología del
Deporte en la Comisión Médica
para los Juegos Sudamericanos, Panamericanos y Bolivarianos.
Por
el año 1985, se registró un nuevo avance de la Psicología del Deporte
en el Ecuador, este avance responde al Primer Seminario Taller de Ciencias
Aplicadas al Deporte organizado por el Consejo Nacional de Deportes, la Federación Deportiva
Nacional del Ecuador, el Colegio de Profesores de Educación Física, la Sociedad Ecuatoriana
de Medicina Deportiva, la Facultad
de Ciencias Psicológicas de la
Universidad de Guayaquil y la Sociedad Ecuatoriana
de Psicología del Deporte.
Cabe
resaltar, que en este mismo año, las academias de disciplinas deportivas incluyeron la participación de Psicólogos en
el cuerpo técnico; como fue el caso de la Academia de Tae Kwon Do “Francisco Carvallo”.
En
1986 la
Federación Deportiva de la Provincia del Azuay,
organiza el Seminario “Deportistas de Élite del Ecuador”, donde se incluyeron
conferencias sobre la preparación psicológica en deportistas.
En
1988 Ecuador se preparó para las II Jornadas Nacionales de Psicología Aplicada
al Deporte, realizadas por la Asociación Ecuatoriana de Psicología del Deporte
– Capítulo Guayas, y con el aval de DINADER, Federación Deportiva Nacional del
Ecuador y el Colegio de Psicólogos Clínicos.
En
1989 la Escuela
Itinerante del Comité Olímpico Ecuatoriano (COE), incorporó
un psicólogo entre los instructores. En la ciudad de Guayaquil, en la Base San Eduardo del
Cuerpo de Infantería de Marina se realizó con un colectivo de psicólogos un Seminario
Taller de Psicología del Deporte.
Así
también se llevaron a efecto las III Jornadas Nacionales de Psicología del
Deporte, organizado por la Asociación Ecuatoriana de Psicología del
Deporte, Capítulo Guayas, con el aval de
la Federación
Deportiva Nacional del Ecuador, DINADER-Guayas, Facultad de
Ciencias Psicológicas, Universidad de Guayaquil, y el Colegio de Psicólogos
Clínicos del Guayas.
En
el mismo año participaron Psicólogos del Deporte ecuatorianos en calidad de
conferenciantes y asistentes al Primer Curso Panamericano de Medicina,
“Ciencias Aplicadas al Deporte” organizado por el Comité Olímpico
Internacional, la
Comisión Médica del Comité Olímpico Internacional,
Solidaridad Olímpica y el COE; iniciándose los primeros contactos con el Dr.
Francisco García Ucha, Psicólogo del Deporte de Cuba.
A
fines de 1990, se dio en Lima-Perú los IV Juegos Deportivos Sudamericanos
ODESUR 90, la delegación Ecuatoriana va acompañada de un psicólogo como parte
del cuerpo técnico, de la misma manera ocurre, en 1991, en los XI Juegos
Deportivos Panamericanos Habana-Cuba 91; y en el COE se creó la
Unidad de Psicología del Deporte asumiendo como director un
psicólogo y se confecciona la primera ficha psicosocial del deporte, atendiendo
a los deportistas de las diferentes disciplinas. En mayo del mismo año, la Federación Deportiva
del Azuay, realizó un Curso para entrenadores deportivos, e invitó a un
psicólogo como conferenciante instructor, en Psicología del Deporte.
En
1992, el Dr. Bruno Stornaiolo escribió su segundo libro titulado Psicología
Deportiva, el mismo que fue publicado por el Ministerio de Bienestar Social, Ediciones
Culturales. Libro que fue premiado por la Unión Nacional de
Periodistas en 1993 como libro del año.
En
1993, la Federación Ecuatoriana de Fútbol incorporó al
Licenciado Omar Lorenzo Mendivia
Psicólogo del Deporte de nacionalidad cubana para que se haga cargo de las
selecciones nacionales de 17, 20 y 23 de mayores. El Comité Olímpico
Ecuatoriano sumó un psicólogo al cuerpo técnico, que acompaña a la delegación
ecuatoriana a los XII Juegos Bolivarianos Santa Cruz- Bolivia 93, el mismo que
participó como ponente - expositor en la Primera Jornada de
Medicina Bolivariana en Santa Cruz de la Sierra , también en la Universidad Privada
de Santa Cruz de la Sierra
y en el Instituto Superior de la Actividad Física.
En
este año la Federación Ecuatoriana de Tenis incorporó un
psicólogo del deporte ecuatoriano para trabajar con los niños y adolescentes
tenistas. Así también la Federación Ecuatoriana de Tenis de Mesa. En los
Juegos Interandinos realizados en Loja del 30 al 8 de Diciembre se incorporaron
un equipo de profesionales dedicados a
la psicología del deporte entre ellos el Dr. Amable Ayora. Es importante
destacar la participación en Psicología del Deporte, del Licenciado Vicente
Cruz y el Dr. Eduardo Tigua, Dr. Oswaldo Zambrano, Dr. Juan Ramón Morán en el
fútbol, del Licenciado Roberto Frisson dirigente deportivo de natación y del
Dr. Manuel Vivanco en tenis de mesa.
En
1994, el Comité Olímpico Ecuatoriano (COE), representó al Ecuador con la
participación de un psicólogo en el Primer Encuentro Internacional de Alto
Rendimiento en la Habana
Cuba , presentando en ese foro internacional la ponencia “El Ideal Personal como Tendencia Motivacional y
Orientadora en Deportistas de Alto Rendimiento”.
En
la ciudad de Guayaquil, en el colegio experimental Vicente Rocafuerte, se dio el Tercer Ciclo Internacional de
Conferencias sobre el Deporte de Alto Rendimiento, organizado por la Asociación Ecuatoriana
de Psicólogos Deportivos, la Federación Deportiva del Guayas y el Colegio de
Médicos del Guayas.
En
los V Juegos Sudamericanos ODESUR que fueron realizados en Valencia - Venezuela
1994, la Delegación Ecuatoriana fue acompañada por un
psicólogo dentro del cuerpo técnico. Es en este mismo año, las relaciones con
Psicólogos vinculados con el deporte, de Cuba, avanzan, es así que un Psicólogo
Ecuatoriano pasa a ser Miembro Adjunto del Departamento de Psicología del
Deporte del Instituto de Medicina Deportiva de La Habana-Cuba .
En
1995 la
Federación Ecuatoriana de Fútbol, incorpora al Licenciado
Omar Lorenzo Mendivia Psicólogo del
Deporte de nacionalidad cubana para que además de las otras selecciones, se
haga cargo de una selección femenina de fútbol. La Federación Ecuatoriana
de Tenis y la Delegación
Ecuatoriana a los XII Juegos Deportivos Panamericanos de Mar
del Plata – Argentina 1995, contaron con la participación de Psicólogo en el
cuerpo técnico.
En
1996, la Federación Ecuatoriana de Béisbol incorporó un
psicólogo del deporte para trabajar con
la selección infantil para el VI Campeonato Sudamericano Infantil,
anteriormente lo hizo para el mundial infantil
que se realizó en Japón. Por otro lado en la ciudad de Cuenca, en el
Tercer Seminario de Alto Rendimiento para entrenadores de Tae Kwon Do realizado
del 23 al 25 de Febrero participó un psicólogo del deporte abordando temas
relacionados con esta especialidad. También se incorporó a la Federación Deportiva
del Azuay al Licenciado Aristides Leiva, psicólogo del deporte de
nacionalidad cubana con vista a los Juegos
Sudamericanos que se realizaron en nuestro país.
En
la ciudad de Loja del 17 al 19 de Abril se realizó, con el aval de la Universidad Nacional
de Loja el Primer Seminario Nacional en Psicología Deportiva bajo la
coordinación general del Dr. Amable Ayora. El 29 de Abril se creó con la asesoría del
director de la Unidad
de Psicología del Deporte del COE, el Departamento de Psicología del Deporte de
la Federación
Provincial de
Loja donde quedó como director el Master
Rogelio Castillo Bermeo.
En
la ciudad de Guayaquil, en los tradicionales Interbarriales de Fútbol del
Diario Universo, se incorporaron como voluntarios psicólogos del deporte los
mismos que siguen participando hasta la fecha, entre ellos el Psicólogo Clínico
Eduardo Molina Morán, Manuel Vivanco, Oswaldo Zambrano, entre otros. Mientras que
en la ciudad de Quito, se realizó un Seminario para los entrenadores de Tenis
sobre Psicología del Deporte, en la
Escuela de Tenis del Club de Tenis Buena Vista.
En
1997, en el COE se constituye la Comisión Médica y Psicológica; y los
Departamentos Médico y de Psicología del Deporte, dando lugar en Ecuador a una
clara definición y diferenciación de las dos especialidades de las Ciencias del
Deporte.
En
1998, continuó la incorporación de Psicólogos dedicados a la Psicología del Deporte
en las instituciones vinculadas a las actividades deportivas, siendo el caso de
la Federación
Ecuatoriana de Tae Kwon Do, la Sociedad Ecuatoriana de
Medicina Deportiva Nacional y el Capitulo Guayas durante la presidencia del Dr.
Rafael Santelices Pintado. En el Torneo del interbarrial de fútbol, del Diario
El Universo, se creó la
Comisión de Psicología del Deporte.
En
1999, la
Federación Deportiva de El Oro, incorporó un psicólogo del
deporte con vista a los últimos Juegos Deportivos Nacionales que se realizaron
en esta provincia, además en la ciudad de Machala provincia de El Oro, la Federación Deportiva
Provincial, creó el Departamento de Psicología de la Actividad Física ,
el Ejercicio y el Deporte.
Los
XIX Juegos Nacionales El Oro – Machala 2000, también contaron con un psicólogo,
facilitado por la Federación Deportiva
Provincial de El Oro. La Federación Ecuatoriana de Fútbol incorporó al Dr.
Luís Alberto Calahorrano en calidad de psicólogo del deporte de la sub 20 con
vista al Sudamericano de fútbol del 2001. Dos planteles educativos de Guayaquil,
el Colegio Cristobal Colón y CEBI incluyen en el equipo técnico ha dos
psicólogos del deporte Dr. Manuel Vivanco y
Psic. Eduardo Molina respectivamente, ampliando la actuación de los
psicólogos involucrados con la
Psicología del Deporte, a la esfera de la educación escolar.
Las
Facultades de Educación Física, Deportes y Recreación en su mayoría, incluían
en sus pensum de estudios la Psicología Evolutiva y durante estos años se ha
incorporado la asignatura Psicología
aplicada al Deporte, enfatizando que ésta sea dictada por psicólogos
involucrados en la actividad deportiva, especialistas o magíster en Psicología
del Deporte. Esto se evidenció entre otras, en
la Facultad
de Educación Física, Deportes y Recreación de la Universidad de
Guayaquil, donde se la incluyó en el
pensum de estudios de las carreras de Licenciatura en Educación Física,
Deportes y Recreación; y Tecnología Deportiva.
La
necesidad de que la
Psicología de la Actividad Física , el Ejercicio y el Deporte sea
conocida por todos los implicados en la actividad deportiva fue la razón de promover
seminarios de capacitación, es así que el Centro de Desarrollo Humano
Capacitación y Asesoría (CEDHUCA), organizó el Primer Seminario de la Actividad Física
y el Deporte del 1 al 4 de febrero del 2001; con el aval institucional de la Federación Deportiva
Nacional de Ecuador y el aval académico de la
Facultad de Ciencias Psicológicas y la Facultad de Educación
Física, Deportes y Recreación de la Universidad de Guayaquil, el mismo que se realizó
en el auditorium “Alberto Spencer” de la Federación Deportiva
Nacional del Ecuador.
Este
evento despertó el interés por parte de la dirigencia de las Federaciones
Deportivas Provinciales de Ecuador y las Federaciones Ecuatorianas por deporte,
planteles educativos de enseñanza básica y de bachillerato, Federación Deportiva
Estudiantil, Asociaciones y Clubes Deportivos, quienes enviaron a participar
del seminario a miembros del cuerpo
técnico; licenciados en educación física, entrenadores, preparadores físicos,
psicólogos y médicos, además asistieron
profesionales y estudiantes universitarios interesados en la Psicología de la
actividad física, el ejercicio y el deporte.
En
la ciudad de Ambato, provincia del Tungurahua, se realizaron los XIV Juegos
Deportivos Bolivarianos Ambato 2001, la Delegación Ecuatoriana ,
contó con la participación de Psicólogos vinculados al Deporte, quienes además
participaron con ponencias, conferencias y trabajos de investigación; se
presentaron los resultados de una de las investigaciones psicológicas realizadas
a los Deportistas de la provincia de El Oro.
En
el 2001, el Dr. Amable Ayora presentó el proyecto de la carrera de Psicología
del Deporte de cuatro años a nivel de pregrado para la obtención de
Licenciatura en Psicología del Deporte, el consejo universitario de la Universidad Nacional
de Loja lo aprobó y fue adscrito a la Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias
de la Educación en ese año. Se hizo la difusión de la carrera e invitaciones a
las instituciones deportivas en esa época pero no se ha logrado hasta la fecha
implementarse.
En
la ciudad de Manta, provincia de Manabí, el Club Mantamar incluyó en su cuerpo
técnico, un psicólogo para realizar
actividades de preparación psicológica y entrenamiento mental a los nadadores
que participaron en los Juegos Nacionales del 2002. También lo hizo en la ciudad de Guayaquil el
Club Bajaña. Por otra parte durante los años 2002-2003, la Federación Ecuatoriana
de Bolos consciente de la necesidad de preparación psicológica para los
deportistas de alto rendimiento, incluyó en su cuerpo técnico, para las
actividades de evaluación psicológica y entrenamiento mental, a un psicólogo.
De la misma manera lo hizo la Federación Ecuatoriana de Gimnasia desde el 2002-2004.
Aproximadamente
entre el 2001 y el 2003 se realizó la primera Maestría en Psicología del
Deporte organizada por la
Facultad de Ciencias Psicológicas de la Universidad Central ,
bajo la dirección del Dr. Jaime Guerra, donde se inscribieron dieciocho
profesionales, logrando graduarse once.
En
mayo del 2003, en la ciudad de Portoviejo, capital de la provincia de Manabí, la Federación Ecuatoriana
de Gimnasia, en ese entonces presidida por el ingeniero Atilio Wong, organizó
el Seminario Taller de Psicología del
Deporte “Preparación Física y Relaciones Personales para entrenadoras de
Gimnasia”, en el que participan todos los entrenadores de Gimnasia de las 22
provincias del Ecuador, dictado por el Prof. Fernando Alonso Cedeño Alejandro,
entrenador y el Psicólogo de la Federación Ecuatoriana
de Gimnasia.
Del
2 al 6 de junio del mismo año, se realizó en la ciudad de Manta el Sexto
Congreso Nacional de Cultura Física “Nuevos Paradigmas de la Cultura Física ”,
organizado por La Escuela de Cultura Física
de la Universidad
Laica Eloy Alfaro de Manabí. Licenciados en Psicología,
Psicólogos vinculados al Deporte y Psicólogos del Deporte participaron con las
siguientes ponencias:
Preparación
psicológica en equipos deportivos Juveniles, Psic. Eduardo Molina; La
motivación y creación de un estado psíquico, Lcdo. Oswaldo Salazar; La Psicología del Deporte,
Lcdo. Cléber Bermeo; Importancia sobre la Psicología del Deporte, Arístides Leiva; Importancia de la
preparación psicológica aplicada a los Deportes de Combate, Lcdo. Patricio
Barragán y José Macias; entre otros.
En el 2003, la Federación Ecuatoriana
de Gimnasia, realizó un curso de Psicología del Deporte para entrenadores de
gimnasia. La Facultad
de Medicina, Escuela de Post Grado, Universidad de Guayaquil conjuntamente con
el Comité Olímpico Ecuatoriano, realizaron; un Post Grado de Medicina del
Deporte, donde estuvo incluido el Modulo de Psicología del Deporte.
Luego
entre el 2005 y 2006 se realizó la segunda Maestría en Psicología del Deporte,
organizada por la Facultad
de Ciencias Psicológicas de la Universidad Central de Quito, bajo la dirección
del Dr. Martín Bonilla, participaron en calidad de maestrantes 21 profesionales
de pre grado, médicos, periodistas, licenciados en educación física, entre
otros.
En
la ciudad de Azogues, la Federación Deportiva del Cañar, organizó un
Seminario Taller de Psicología de la Actividad Física ,
el Ejercicio y el Deporte, el mismo que fue dictado por el Presidente de la Asociación de
Psicología del Deporte, psicólogo voluntario del COE, además se creó el
departamento de Psicología del Deporte, el mismo que estaba a cargo de la Psicóloga Paulina
Minchala.
En
mayo del 2005 se constituyó la Sociedad Iberoamericana
de Psicología del Deporte, en Santiago
de Compostela (España), designándose como Vocal de la Sociedad a un Psicólogo
Ecuatoriano. El Centro de Alto Rendimiento del COE contó en sus inicios, con un
psicólogo voluntario dentro de su cuerpo técnico, y en la actualidad con el
Psicólogo Dr. Manuel Vivanco.
En
febrero del 2006 se realiza el Congreso Internacional de Ciencias Aplicadas al
Deporte, organizada por el Dr. Martín Bonilla; en los meses de abril y mayo se
realizaron Ciclos de Conferencias sobre Psicología del Deporte, dictados por el
Psicólogo Julio Espinoza de nacionalidad Cubana, el mismo que ha publicado un
libro sobre Psicología del Deporte y labora en la Federación Deportiva
del Guayas.
Actualmente
estudiantes cuarto y quinto de psicología de clínica de la Facultad de Ciencias
Psicológicas de la
Universidad Central de Quito, están haciendo pasantías en la Concentración
Deportiva del Pichincha, bajo la coordinación del Dr. Romel
Aguirre Martín.
En
la Universidad
de Guayaquil, se prepara un estudio de mercado objetivo para determinar el
grado de interés por parte de Psicólogos
y otros profesionales vinculados a la actividad deportiva, para establecer la probabilidad
de iniciar un programa de post grado en Ciencias del Deporte, con
especialidades entre ellas de Psicología de la Actividad
Física , el Ejercicio y el Deporte.
En
Guayaquil, en la
Federación Ecuatoriana de Karate, se dio la conferencia “Estado
óptimo del deportista de karate de alto rendimiento”; “Perfil psicológico del
entrenador de karate” en el aditorium del Polideportivo Huancavilca.
Actualmente
está por editarse la Revista
Intercontinental Ciencias del Deporte, anunciada en el libro Psicología de la Actividad
Física y del Deporte escrito por el Dr. Joaquín Dosil (2004),
revista que cuenta con la colaboración de diversos profesionales iberoamericanos,
protagonistas de las Ciencias del Deporte.
En
estos últimos años, la psicología de la actividad física y del deporte se ha
desarrollado, existiendo psicólogos dedicados al deporte en Federaciones
Deportivas Provinciales de: Los Ríos, Manabí, Esmeraldas, Napo, Loja, Azuay,
Cañar, Pichincha, Imbabura, El Oro, Guayas entre otras, así como en Clubes Deportivos.
Es necesario señalar que en su mayoría lo han venido realizando empíricamente,
y otros han recibidos cursos de post grado y actualmente participan en
maestrías.
Hoy
por hoy, en el imaginario social de las personas vinculadas a la actividad física
y el deporte, hay un nivel de concienciación sobre la importancia de la Psicología del Deporte
y su aplicación en los procesos de iniciación, formación, y alto rendimiento,
de manera que, en los actuales planes de entrenamiento se incluye el entrenamiento
mental.
La Copia Total o parcial de artículo para su uso en otros sitios o trabajos, se debe realizar bajo la previa autorización del autor del Blog y estableciendo las respectivas referencias bibliográficas.
www.franklinandradefabre.blogspot.com
Autor.: Psic. Clín. Franklin Andrade Fabre
Ponente.: Conferenciante en la Primera Conferencia Internacional de Deportes de Alto Rendimiento por el Comité Olímpico Ecuatoriano.
Tema: El Ideal Personal como tendencia motivacional y orientadora en deportistas de alto rendimiento.
Lugar.: La Habana-Cuba. Abril 1994
Correo.: andradefabre@gmail.com
Ponente.: Conferenciante en la Primera Conferencia Internacional de Deportes de Alto Rendimiento por el Comité Olímpico Ecuatoriano.
Tema: El Ideal Personal como tendencia motivacional y orientadora en deportistas de alto rendimiento.
Lugar.: La Habana-Cuba. Abril 1994
Correo.: andradefabre@gmail.com
Esta propuesta teórica, metodológica y técnica, relacionada con el deporte
y los deportistas, la he hecho desde el convencimiento que el deporte desde
ayer, ahora, siempre y más en este nuevo milenio, juega un papel destacado en
el mantenimiento de la convivencia social e integración de nuestros pueblos
constituyendo una manifestación cultural que sirve como proceso social para la
construcción de nuevas formas de convivencia social y de paz. Así también de
orientación para el desarrollo humano y la personalidad de los involucrados en
el deporte, de manera específica en los deportistas.
PROCESO DE
CONSTRUCCIÓN SOCIAL
Todos sabemos que la
sociabilidad, la convivencia social, la integración, la paz no existe en
abstracto, se construyen en el proceso social de convivencia de los seres
humanos, en las distintas estructuras sociales de los distintos modos de
producción existentes.
EL DEPORTE COMO PRODUCCIÓN ESPIRITUAL
El deporte, la
ciencia, las artes, no existen en abstracto, se producen, y somos nosotros, los
seres humanos quienes producimos estos bienes espirituales para nuestra
convivencia social y el desarrollo humano sano
LA REVOLUCION CIENTÍFICO TÉCNICA Y LA DEMANDA
SOCIAL DEL SIGLO XXI
Latinoamérica, América y
el planeta producto de la revolución científica-técnica expresada a través de
las nuevas ciencias tales como la
informática, las telecomunicaciones, la ecología, la psicología entre
otras, marcan nuevos procesos de integración de nuestros pueblos. Y la demanda
social es, la producción de una cultura de paz, de integración, de convivencia
social y desarrollo humano sano.
LA MISIÓN Y EL DEPORTE
•
En
consecuencia a todos nosotros como ciudadanos del mundo nos toca construir una
cultura de paz y es el deporte un espacio para promover esta cultura de
integración y de convivencia social para todos los seres humanos involucrados
en la actividad deportiva y más allá.
DEPORTE Y APRENDIZAJE
•
Esto es
así, porque el deporte como actividad y proceso de aprendizaje forma la conducta y personalidad de las
personas involucradas debido a que los seres humanos no existen en abstracto
sino que su existencia es posible como relación social en un determinado tipo
de sociedad.
•
Esto
significa que el ser humano y la sociedad son un par dialéctico, lo que nos
permite concluir que no puede existir el ser humano sin una estructura social
que posibilite su existencia, su vida, convivencia social y estilo de vida.
DEFINICIÓN DE SER HUMANO
•
Por lo
tanto definimos al ser humano como una unidad biopsicosocial producto de la
dialéctica de la naturaleza, la dialéctica de las estructuras sociales, la
dialéctica de la individualidad y de la actividad productiva, que lo
caracteriza como uno y diverso mediado por la cultura.
•
PSICOLOGÍA DIALÉCTICA DE ORIENTACIÓN HISTORICO
CULTURAL
•
A partir de estas reflexiones teóricas que corresponde a
la psicología dialéctica con orientación histórico cultural que enfatiza las
categorías, actividad, reflejo activo de lo psíquico, el carácter social de lo
psíquico, la situación social del desarrollo humano, las neoformaciones durante
el ciclo vital, las vivencias, la
comunicación y la elaboración personal nos permite señalar que los seres
humanos no nacen con ideas, con ideologías, con creencias por lo que podemos
decir que los procesos cognoscitivos, afectivos y volitivos del sujeto y los
que estos crean, se producen a partir de la actividad y las vivencias en la
medida que el ser humano existe, vive y establece relaciones sociales que
posibiliten la producción de bienes materiales y espirituales para su
existencia y convivencia social.
ACTIVIDAD Y PROCESOS PSIQUICOS
•
Esto
nos lleva a concluir que los procesos cognitivos conductuales, afectivos y
volitivos, no se originan a partir del aprendizaje sino a partir de la
actividad y las vivencias que posibilitan estos procesos debido a que, el
aprendizaje es una relación social de producción indirecta que se produce en
todo tipo de sociedad, en la vida de relación del conjunto de los seres
humanos, por lo que es en la situación social de desarrollo, en la actividad y
en las vivencias que se producen y se reproducen los aprendizajes lo que nos
permite señalar que los seres humanos son portadores y productores de
ideologías y los contenidos de las cogniciones se construyen en la vida social
de los sujetos durante sus respectivas
historias de vida.
EL COMPORTAMIENTO, CONDUCTAS E IDEOLOGIAS
•
De ahí
que podemos definir al comportamiento como manifestaciones de la dialéctica de
la naturaleza expresada en los seres humanos como manifestaciones de la
actividad neurofisioendocrinológica que por el carácter activo y social de la
condición humana y la dialéctica de las estructuras sociales se transforman en conductas mediadas por el
aprendizaje, en la medida que las conductas son aprendidas y en la medida que
las ideas se construyen en el proceso social, por lo que podemos indicar que
las ideas no son de nosotros sino producto de la relación social aunque su
materialización pueden y al parecer expresan la individualidad de los sujetos
que las portan y producen.
DEFINICION DE PERSONALIDAD
•
La
dialéctica de la individualidad al parecer nos permite diferenciar entre
comportamiento y conducta por las definiciones antes señaladas y al parecer
precisar la definición de personalidad como la función reguladora e integradora
de los procesos cognoscitivos, afectivos y volitivos del psiquismo humano del
sujeto en su desarrollo histórico social. Es decir que la personalidad es una
función integradora y reguladora de los procesos psíquicos que nos permiten
conocer, sentir y actuar en la vida diaria.
ACTIVIDAD Y VIVENCIAS
•
Por lo
que podemos decir que la actividad posibilita la apropiación de conocimientos y
el ejercicio de la voluntad en la toma de decisiones y, las vivencias
constituyen la base de la afectividad de tal manera que, vivencias agradables,
placenteras dan lugar a emociones y sentimientos agradables y placenteros, así
también, las vivencias desagradables dan lugar a emociones y sentimientos
desagradables.
CONSCIENTE VOLITIVO y CONSCIENTE AFECTIVO
•
Por lo
que podemos señalar que la actividad es la base de la estructura, dinámica y
desarrollo de la personalidad, la misma que, en su integración y regulación da
lugar a un nivel superior de la personalidad que corresponde al consciente
volitivo, los mismos que dan lugar a un conjunto de rasgos que caracterizan su individualidad
por una parte y por otra, la actividad como proceso social en la vida de
relación de los sujetos da lugar a las vivencias, las mismas que, en su
articulación al nivel superior consciente volitivo de la personalidad da lugar
a otra instancia superior de la personalidad, el nivel consciente afectivo que
también dan lugar a otros rasgos que caracterizan su individualidad.
LOS MOTIVOS Y LA MOTIVACIÓN HUMANA
•
Lo que
significa que al igual que la estructuración del psiquismo humano, los motivos
se originan a partir de la actividad de afuera hacia adentro y de adentro hacia
fuera permitiéndonos tener una comprensión sistémica del origen de los motivos
y de la motivación humana resolviendo las contradicciones del reduccionismo
subjetivo y objetivo presente en los enfoques dinámicos y conductistas
respectivamente por una parte y por otra posibilitando la explicación de cómo
se estructura el psiquismo humano y como surgen los comportamientos, las
conductas, los rasgos de personalidad, los procesos de concienciación y los
ideales en los seres humanos.
EL IDEAL PERSONAL
•
Esto
último nos permite decir que el Ideal Personal constituye un motivo sistémico
esencial superior de la personalidad que caracteriza la individualidad de cada
sujeto en su condición de relación social como ser histórico social, con sus
singularidades, particularidades y peculiaridades y en relación con el
ambiente, los demás y consigo mismo.
•
El
Ideal Personal en los seres humanos es una tendencia motivacional y orientadora
que le da sentido y dirección a nuestra vida.
EL IDEAL PERSONAL NIVEL SUPERIOR DE LA
PERSONALIDAD
•
El
Ideal Personal es el sentido que le damos a nuestra vida, constituye un proceso
de elaboración personal superior de concienciación que regula e integra los
niveles del consciente volitivo y el consciente afectivo de la personalidad del
sujeto y se materializa en conductas asertivas y solidarias.
¿Cómo concienciar el Ideal Personal en los
sujetos, en los deportistas de iniciación, formación y de alto rendimiento?
•
En la
iniciación, formación, mejoramiento y el alto rendimiento deportivo con
deportistas hemos posibilitado en algunos de ellos el desvelamiento de su
tendencia motivacional y orientadora a partir de la actividad deportiva a
través de los procesos de evaluación psicológica, el psicodiagnóstico,
la preparación psicológica y el entrenamiento mental durante la actividad deportiva en los períodos de
entrenamiento tales como el período general o de preparación física, el período
específico o de preparación técnico táctico, el período competitivo antes,
durante y después de las competencias y
finalmente durante el período de transición.
Métodos y técnicas que se han usado para concienciar y
materializar el Ideal Personal en los deportistas de iniciación, formación y de
alto rendimiento deportivo
En grupos:
- El método de las conferencias.
- Método de clase.
- Métodos visuales.
- Métodos de discusión libre.
- Talleres de reflexión grupal.
- Talleres de desarrollo humano.
- Métodos de observación participante.
Individual:
- La entrevista.
- Ficha biopsicosocial del deportista.
- El Inventario Personal.
- Reflexión y elaboración personal.
- Desarrollo del pensamiento lógico.
- Bibliografía y control de lecturas.
- Métodos de cintas magnetofónicas.
- La elaboración personal de la frase que sintetiza y expresa el Ideal Personal.
- La elaboración del plan, programa, estilo o régimen de vida, el horario de vida semanal.
- Elaboración de objetivos de vida a largo, mediano y corto plazo.
- Fijación de metas de vida y rendimientos deportivos semestrales, trimestrales, bimensuales, mensuales, quincenales, semanales, diarios.
- Determinación de actividades diarias en función de objetivos, metas de vida, rendimiento deportivo y uso del tiempo libre.
- Elaboración del horario de vida semanal.
- Elaboración del plan de entrenamiento y calendario de competición deportiva.
- Elaboración del contrato conductual.
- Seguimiento y auto evaluación.
- Evaluación y modificaciones.Asesoramiento.
- Preparación psicológica y entrenamiento mental durante el plan de entrenamiento y calendario de competición deportiva.
- Ejecución y resultados.
La Copia Total o parcial de artículo para su uso en otros sitios o trabajos, se debe realizar bajo la previa autorización del autor del Blog y estableciendo las respectivas referencias bibliográficas.
www.franklinandradefabre.blogspot.com
Autor: Franklin Andrade Fabre
(Tesis de grado de Psicólogo Clínico)
Año: 1982
Tomado de:
Revista Universidad de Guayaquil Nº 3 (57)
Julio – Sept. 1984
Derechos de Autor: La copia total o parcial de este artìculo para su uso en otros sitios o trabajos se la debe realizar bajo la previa autorizacion del autor de este Blog y estableciendo la debida referencia bibliografica.
Estructura y Psiquismo
El hombre es uno y diverso, constituye un elemento de la realidad material de la naturaleza, en el orden biológico y en cuanto a ser biológico, es base material de las relaciones entre la naturaleza y la sociedad, mediado por lo cultural; de tal manera que el hombre como ser concreto es una relación de lo natural y lo social. Por lo tanto, el hombre es un producto bio-social, y como tal, es una relación social lo que nos devela que el hombre en abstracto no existe, lo que existe es una relación social y es en esa relación donde se da lo psíquico como expresión material de las relaciones de lo biológico, lo social y lo ideológico.
De ahí, que definamos al hombre como una unidad bio-psico-social. Pues la esencia humana no es algo inherente a cada individuo. Es en realidad, el conjunto de las relaciones sociales y los cambios históricos que se producen en la naturaleza, en la sociedad, en la vida material, los que conllevan al mismo tiempo, a otros cambios en la naturaleza humana, en el psiquismo, en la conciencia, en el comportamiento humano.
Por lo tanto, lo psíquico no tiene una sola matriz y una sola dirección neurofisioendocrinológica, tampoco es exclusivamente social, sería una articulación de lo social y lo neurofisioendocrinológico que da lugar a una instancia que no es lo uno ni lo otro, que es lo psíquico.
Constituyéndose lo psíquico en una realidad que ni puede ser disuelta ni en lo estrictamente biológico ni en lo estrictamente social, la misma que vendría a ser una realidad en el orden de lo ideológico, sin que se agote en él y sin que lo ideológico sea remitido a lo falso de lo social o reductible a lo biológico o social.
Lo psíquico se desenvuelve en el horizonte de lo ideológico; determinando por dos matrices, lo social y lo biológico, y se da en un marco ideológico; por consecuencia, se dan tres niveles de referencia a lo psíquico, lo estrictamente biológico, lo social y lo ideológico. De ahí que el comportamiento del hombre se ha ido transformando conjuntamente con el cambio del modo de producción y las condiciones de existencia, pues el desarrollo del psiquismo en el hombre, es un producto dialéctico y en relación al desarrollo y evolución social, al modo de producción, a las relaciones de producción y a las condiciones materiales de la naturaleza y de vida que ha tenido que enfrentar y superar. Razón por la cual, afirmamos que no puede surgir, ni desarrollarse actividad psíquica humana sin existencia social, debido a que es el ser social que determina la existencia y estrecha la correspondencia de los niveles cognitivos, afectivos y volitivos de la condición humana.
Por eso la conclusión de que, es la conciencia social la que determina la conciencia individual, debido a que la psiquis es un proceso que expresa el desarrollo histórico y dialéctico de la materia por ser expresión de la materia más altamente evolucionada y la síntesis de la evolución del hombre en su quehacer permanente de ser conocedor y transformador de la naturaleza, de los diversos sistemas sociales y de las relaciones sociales de producción que éstos produzcan.
Por esto es que la psiquis sería la expresión más alta de los procesos de la materia en el desarrollo histórico-social. Esto significa que lo psicológico tendría un orden bio-social y otro orden ideológico, lo que da lugar a un carácter sintético de la comprensión de lo psíquico en términos de entender un origen material natural y otro origen material social, pero que no es reductible a lo bio-social, sino como expresión de lo bio-social, que se daría en el orden de la conciencia, lo que nos remite a dos aspectos. Primero a señalar que lo normal y lo patológico no reposa sobre el sujeto, sino a la condición que sujeta a este individuo, es decir, a la estructura social. Segundo, se trata pues de que lo normal y lo patológico aún estando remitido al sujeto, es independiente de él y solo adquiere una comprensión científica, cuando está remitida a la relación de los sujetos, en la estructura y al hacer de estos sujetos, determinados por la estructura, aun hacer de los sujetos en la estructura y a un hacer de la estructura en los sujetos. Es decir, que habría doble tipo de relación, por un lado, la relación entre los sujetos y los medios de producción y por otro lado, la relación de los sujetos y la estructura. De ahí que lo normal y lo patológico hay que referirlo a la estructura y no al sujeto, aunque el individuo sea el que lo aporte, lo expresa, pues la dimensión profunda del origen de lo normal y lo patológico no está en el sujeto, está en la estructura y en la que ésta escribe en el sujeto.
Por lo tanto tenemos que, los procesos psíquicos se explican en la relación social de los individuos y esta relación social tiene tres órdenes que configuran una estructura significante. Una relación social, que aparece como relación de los sujetos a nivel interpersonal que constituye la percepción empírica, Ejemplo: la relación entre nosotros.
La que solo se explica con una relación de producción y esta relación de producción configura en su movimiento, una estructura. Esta estructura, que es resultado de las relaciones sociales de producción sujeta a los individuos en las relaciones sociales e interpersonales, incluso independientemente de que los sujetos estén insertos en el proceso productivo, esta relación no sólo produce bienes materiales sino que también produce una cantidad de elementos que no se agotan en lo estrictamente material, va a la región ideológica, imaginaria y simbólica, pero que no se disuelve en lo imaginario, y en lo simbólico, sino que lo imaginario y lo simbólico proviene de su relación de producción por lo que se dice que la relación social de producción no es otra cosa que un proceso que busca por un lado producir bienes materiales para la satisfacción de las necesidades y reproducir las condiciones de existencia social.
Entendiendo como reproducción de condiciones de existencia social al cúmulo de valores espirituales que no entran en el orden de lo estrictamente material y que posibilitan la permanencia, la supervivencia y la continuidad, no sólo de los individuos, sino de la sociedad; no como la correspondencia de los bienes a la satisfacción de las necesidades de los que la producen porque terminaríamos tendiendo una percepción infraestructuralista de las relaciones sociales de producción lo que significaría que las relaciones sociales de producción nos remiten sólo a lo económico y no es así. Puesto que las relaciones de producción nos remiten a una dimensión de producción de bienes materiales y de bienes espirituales que sirven para la reproducción social.
Así tenemos que la sociabilidad no existe en la sociedad, sino que ésta se produce en el proceso social de la producción, la cultura no existe, se produce; pues no puede tener una existencia sino se da una relación social de producción. Es desde ahí que pretendemos ver el horizonte real de lo psíquico.
La primera percepción, la más empírica, es donde las gentes se quedan en lo fenomenológico, en la apariencia, en la relación interpersonal; no percibiendo la relación social de producción que es la que facilita su existencia. Es la que justamente hoy, la relación capitalista le da esa apariencia expresándosela como relaciones entre sujetos y entre personas, cuando en realidad no existen relaciones entre personas y entre sujetos, sino relaciones entre clases, entre dominantes y dominados; entre explotadores y explotados. Por consiguiente, es el tipo de relación social de producción dominante, la relación capitalista la que opaca esta apariencia, generándose de esa manera, como falsa conciencia y articulándose ésta como lenguaje, pero no mecánicamente, sino entendiéndose desde la estructura, debido a que es ella la que va haciendo, poniendo y depositando en los individuos, la ideología que da lugar a la falsa conciencia, sujetando a los sujetos, de tal manera que, los sujetos portan ideologías, pero ellos creen que esas ideas son de ellos, no se dan cuenta que esas ideas no sólo provienen de las relaciones, sino además, que provienen de una estructura, estableciéndose por lo tanto, que las ideas se explican no sólo por las relaciones, sino por una estructura que configura esas relaciones y las produce; he ahí el sujeto sujetado.
Lo psíquico hay que entenderlo ahí y no concluirlo en lo fisiológico pues nos permite ubicar lo psíquico en una doble dimensión; una, referido estrictamente a los procesos neurofisioendocrinológicos, generados por esa unidad que la denominamos bio-social y otra dimensión de lo psíquico, que se muestra a través del lenguaje y que se expresa en la ideología de una sociedad. De ahí el poder terapéutico de la palabra que desde una comprensión científica, posibilita develar lo falso de la conciencia.
La relación social capitalista, es una relación que necesita “cosificar” a los sujetos, existe en tanto y en cuanto cosifique a los sujetos y existe para cosificar a los sujetos, solo cosificándolos, los sujetos no logran comprender que son sujetos, sujetados por un lado y por otro, sólo cosificándolos los puede manipular. Por lo que no solo es el problema de una necesidad del producto, sino además de una necesidad, expresado de otra manera, el sujeto es producto y productor de ideología, es portador y productor. De allí que lo normal y lo patológico a pesar de vincularse a un sujeto, tenemos que referirnos al conjunto de dimensiones que configuran a ese sujeto por lo que ese sujeto empíricamente, aparencialmente, fenomenológicamente se lo percibe en una relación social de producción, configura una estructura que es la que sujeta el sujeto, la que lo ubica en su origen y condición de clase.
Entonces. ¿a dónde hay que remitir lo normal y lo patológico?. Lo normal y lo patológico serían términos que hacen referencia a estos tres órdenes. Lo fenomenológico, las relaciones sociales de producción y a la estructura.
Cuando decimos que lo normal y lo patológico hace referencia a estos tres órdenes, indicamos que si nos quedamos entendiendo lo normal y lo patológico exclusivamente en las relaciones sociales de producción tendremos una visión infraestructuralista, es decir, una visión economicista de lo psíquico, por lo que los procesos psíquicos hay que remitirlos a la estructura, en otras palabras, el camino que veíamos de la articulación de estos tres niveles, nos permite ubicar el problema de lo normal y lo patológico.
Para nuestra sociedad con una estructura capitalista, aunque de un capitalismo dominado, por lo tanto, atrasado y dependiente, lo normal es que no se atente contra la propiedad privada de los medios de producción. Por lo que debemos apuntar, es a develar desde dónde se comprende lo normal y lo patológico, desde la apariencia corresponde a un nivel que responde a una percepción ideológica de lo normal y lo patológico.
Comprender lo normal y lo patológico desde las relaciones sociales de producción, es una comprensión economicista, porque va exclusivamente a las relaciones sociales de producción y no a las estructuras que configuran y producen esa relación.
Finalmente, comprender lo normal y lo patológico en la estructura, nos permite comprender que éstas se dan en todo tipo de estructuras y, por lo tanto, lo normal y lo patológico está referido a todo proceso. Por ejemplo, un proceso no productivo directo, es la relación enseñanza-aprendizaje, profesor-alumno; aquí encontramos el problema de lo normal y lo patológico, pero eso no lo entendemos ni de la percepción ideológica ilusoria, el primer nivel que hemos señalado para la comprensión, ni desde el segundo nivel, lo entendemos desde el tercer nivel. Es decir, la relación dialéctica enseñanza-aprendizaje, profesor-alumno, no se entiende desde la relación social de producción aunque ella sirva para explicar, se la conoce desde la estructura que le da significado a esa relación.
De la misma manera, podemos ejemplarizar la relación salud-enfermedad, terapeuta-enfermo, psicólogo-paciente. Puesto que la relación salud-enfermedad, terapeuta-enfermo, psicólogo-paciente, está referido a todo proceso en el que la estructura le da significado a esta relación.
Autor: Franklin Andrade Fabre
(Tesis de grado de Psicólogo Clínico)
Año: 1982
Tomado de:
Revista Universidad de Guayaquil Nº 1 (55)
Enero - Marzo 1984
Derechos de Autor: La copia total o parcial de este artìculo para su uso en otros sitios o trabajos se la debe realizar bajo la previa autorizacion del autor de este Blog y estableciendo la debida referencia bibliografica.
El Rol del Psicòlogo
La relación social de producción, es un proceso que busca dar como resultado, bienes materiales para la satisfacción de las necesidades sociales y para reproducir las condiciones de existencia social. Reproducción social que, produce la sociabilidad, cultura, ideología, ciencia, tecnología, etc., en el conjunto de los hombres.
Por esto, sabemos que la ciencia es un producto de las relaciones sociales de producción, del desarrollo de las fuerzas productivas de un modo de producción en un determinado momento histórico.
La ciencia como reproducción cognoscitiva real del mundo objetivo, demuestra en su hacer, que la realidad es materia en movimiento y que el movimiento produce formas donde una y otras constituyen y producen formas más avanzadas de la realidad; por esto, la ciencia presenta un conjunto de conceptos que develan y enseñan a conocer la realidad desde la misma realidad.
La ciencia es un proceso sin sujeto individual, en la medida que es el producto del desarrollo de las fuerzas productivas que se expresan como un instrumento que proporciona saber y que necesita de otro que sólo sea tal, en el sentido que éste no se incluya a sí mismo en el saber que críticamente hay que saber, es decir el método científico.
Desde esta perspectiva comprendemos que la Psicología desprendiéndose de la Filosofía, se convierte en disciplina científica en un momento del desarrollo de las fuerzas productivas y de las relaciones de producción correspondiente. Luego, se desarrolla como disciplina científica en la sociedad moderna, capitalista.
En éstas últimas décadas de su desarrollo y avance, como consecuencia del desarrollo de las fuerzas productivas de las estructuras capitalistas y socialistas, de las condiciones existentes entre estos dos sistemas y el avance de la ciencias y demás disciplinas científicas, aparecen las condiciones para que la Psicología se constituya en ciencia, en la medida que esta integra un saber que, apoyado del método científico, es capaz de criticar la ideología, aceptando como señala Althusser como ciencia al expresar que “la ciencia, es la ciencia de una ideología a la que critica y explica”.
Entendiendo como ideología lo deformado de lo real y como producto de una estructura social, es decir, como el saber empírico, saber pre-científico.
Por lo tanto podemos concluir que la Psicología es una ciencia que tiene como objeto de estudio la psiquis, entendida ésta como la expresión espiritual más alta de los procesos de la materia en movimiento, en el desarrollo histórico social, manifestada en el hombre concreto en una estructura social determinada.
Por consecuencia, toca a la Psicología el estudio de lo psíquico, los procesos psíquicos, su actividad bio-psico-social y demás formas donde ésta se evidencia.
Partiendo de estas consideraciones, pretendemos ubicar el rol del Psicólogo, comprendiendo en primer lugar, al Psicólogo como sujeto social, como una relación social que pertenece a una estructura social determinada en la que su existencia como profesional surge como producto del modo de producción dominante. Por consiguiente, los profesionales son entonces, prácticas sociales relacionadas con el saber, con la ciencia, las técnicas, etc.
Decimos esto, pues toda relación social, toda ciencia, toda ideología, el hombre mismo se explica a partir del proceso social que lo constituye.
El Psicólogo es por lo tanto, un hombre concreto inmerso en las relaciones sociales de producción al igual que los demás profesionales. En tal virtud, al Psicólogo, se lo puede definir como una relación social, ya sea investigador, científico, profesional o técnico de la Psicología; su campo es estudiar, investigar, analizar, sacar conclusiones, saber, conocer, comprender el psiquismo, los procesos psíquicos, la actividad bio-psico-social y las otras formas donde ésta se expresa. En definitiva, su papel es actuar en el movimiento y en las diversas formas de expresión de la psiquis.
El Psicólogo tiene en su accionar un campo bastante complejo, difícil, amplio, vasto; por lo que necesita ser un conocedor de métodos, técnicas, instrumentos, conocimientos, afines a la psicología, etc., saber utilizar adecuadamente todos sus conocimientos e instrumental, así como fundamentalmente reconocerse y sentirse persona, ser humano, hombre concreto, relación social. Es decir, sujeto-actor de la historia en igualdad y conjuntamente con los demás hombres.
Partiendo desde esta perspectiva, el Psicólogo tendrá la posibilidad de comprender a los sujetos y podrá utilizar sus conocimientos en las áreas de trabajo que le toque desempeñar. De ahí que sea también necesario que, para la comprensión de los sujetos, aquel tenga presente que “no es la conciencia” y por lo tanto, “es la conciencia social la que determina la conciencia individual”, debido a que es el ser social que determina la existencia y la estrecha correspondencia de lo cognoscitivo, afectivo y volitivo de la conciencia humana.
Por lo tanto, el Psicólogo es un sujeto que trabaja con su objeto de estudio, la psiquis humana, con el hombre concreto; por consecuencia, trabaja en, con, la ideología en una estructura social determinada; en unos casos para afirmarla, consolidarla; en otros, para desmontarla, develarla, explicarla y criticarla conjuntamente con otros sujetos en el proceso social. Esto es factible para el Psicólogo, debido a que trabaja en, con, sobre, detrás y por debajo de la conciencia; así como lo hace con otras actividades del psiquismo como la conducta, etc.
De tal manera ubicamos y señalamos su rol, en la seguridad de que las prácticas profesionales son en primera y en última instancia, prácticas de clase y es desde esa realidad que considero que el psicólogo de cualquier especialidad debe considerar su rol en un hacer como investigador, científico, profesional, técnico orientado a la prevención de la higiene y salud mental, psicodiagnóstico, psicoterapia, asesoría y capacitación etc.
Cuando el Psicólogo de cualquier especialización no logra comprender su rol y práctica profesional, en unas ocasiones pasa a ser un instrumento más del aparato ideológico del Estado, dedicado a la tarea de integrar o reintegrar a los sujetos al “orden”, al sistema, e incluso son portadores de la ideología dominante del sistema, instrumentos cosificadores, manipuladores, entrampados en sus prácticas profesionales por el aparato del Estado, en el que casi siempre su rol se deforma, asegurando las condiciones políticas para la reproducción de las relaciones sociales de producción dominantes, utilizando los conocimientos psicológicos, la palabra, su acción, para evitar que las contradicciones sociales no se manifiesten en conflictos sociales, agresividad, tensiones y protestas organizadas e individuales, de cuestionadores y transformadores de la sociedad.
Pero cuando el Psicólogo de cualquier especialización logra comprender su rol y por consecuencia su práctica profesional, en primer término es consciente de su trabajo y por lo tanto, se esfuerza permanentemente por elevar sus niveles de conciencia crítica, de profundo humanismo, su homeostasis, sabe que su trabajo es, en gran medida, trabajar con la ideología porque conoce el poder de la palabra y su uso científico en la terapia. Es el Psicólogo que logra comprender que es la ideología la que entra a representar las relaciones sociales de producción, debido a que está consciente y conoce que “toda producción de ideas, representaciones, expresiones, aparecen entrelazadas con la actividad material y en intercambio de los hombres”, como lo señalarán C. Marx y F. Engels en el primer capítulo de la ideología Alemana.
Por tanto, el Psicólogo que asume su rol conscientemente sabe distinguir entre ideología y ciencia, reconoce que entre ellas hay una relación indisoluble que las une y las distingue, debido a que ambas se necesitan: la primera, la ideología por ser lo deformado de lo real, lo aparente, lo fenomenológico que hay que develar; la segunda, la ciencia que es la que critica y explica la apariencia de lo real.
En consecuencia, se trata del Psicólogo que asume su rol como sujeto histórico perteneciente a una clase que opta por el conjunto que porta lo patológico, por el hombre concreto patologizado uno y diverso en una estructura determinada. Es el Psicólogo, sujeto histórico profesional que busca el logro y la prevención de la salud e higiene mental y, en ningún caso el profesional que pretende “individualmente” o desde la Psicología transformar el sistema social.
Finalmente consideramos que es en el proceso histórico-social, donde el Psicólogo va escribiendo y haciendo su praxis concreta y es en ella que se objetiviza su rol y el tipo de Psicólogo que ha optado ser.
Autor: Franklin Andrade Fabre
(Tesis de grado de Psicólogo Clínico)
Año: 1982
Tomado de:
Revista Universidad de Guayaquil Nº 4 (58)
Oct. – Dic. 1984
Derechos de Autor: La copia total o parcial de este artìculo para su uso en otros sitios o trabajos se la debe realizar bajo la previa autorizacion del autor de este Blog y estableciendo la debida referencia bibliografica.
El Psicodiagnòstico
El proceso psicodiagnóstico se expresa en la práctica profesional del psicólogo como una instancia y un momento de su práctica, en la relación de dos o más personas en la que configuran una situación en la estructura social manifestada en las relaciones sociales de producción con roles bien definidos, tales como examinador-examinado (s), analizador – analizado (s), psicólogo – paciente (s).
Constituye una relación en la que una persona o familiar solicita o pide ser examinada, analizada, asesorada y, otra acepta el pedido y se compromete a satisfacerla en la medida de sus posibilidades.
Es una situación de constatación, de duración limitada cuyo objetivo es lograr una descripción y comprensión lo más profunda y completa que sea posible del psiquismo, de los procesos psíquicos de la ideología del hombre concreto en una estructura social, en un momento histórico socialmente determinado.
Expresado de otra manera o forma, el psicodiagnóstico es un proceso que investiga el psiquismo humano en el aquí y ahora, por lo tanto, es una relación situacional, que enfatiza por una parte, la investigación de algún aspecto particular según las características o sintomatología, por otra parte abarca aspectos del ayer hoy y el devenir de las persona o personas examinadas, analizadas y evaluadas; utilizando para el logro de tales objetivos, técnicas tales como entrevistas psicológicas, libres, semiestructuradas, estructuradas, etc., observación clínica, reactivos-psicológicos y otros e incluso pruebas y derivaciones complementarias de otras prácticas profesionales afines.
El Psicodiagnóstico como todo proceso tiene momentos que en la relación bipersonal, sea esta psicólogo-paciente, psicólogo-familia, psicólogo-grupo social, se manifiesta en un orden más o menos sistemático.
La apertura del proceso psicodiagnóstico generalmente se inicia con el primer contacto del interesado, puede ser directa o por intermedio de otra persona.
La primera entrevista es libre y en ella la persona entrevistada nos facilita los datos de identificación y los motivos de la consulta.
Posteriormente, ordenamos la información obtenida y en base a ésta elaboramos preguntas que guarden relación con los datos de la primera entrevista y otras, que nos faciliten información de los antecedentes familiares y de su historia personal. Este lo hacemos con el objeto de obtener la más amplia información bio-psico-social familiar e individual.
Con estos cuestionarios realizados una o dos entrevistas semiestructuradas, para luego con las respuestas logradas analizar las mismas, ordenarlas, separando los signos y síntomas para agruparlos y de esta manera establecer criterios sirviéndonos de nuestro instrumental teórico para a continuación seleccionar y ordenar previamente los reactivos psicológicos que conformarán la batería adecuada según el caso, preparando el ambiente para la aplicación, luego las analizamos e interpretamos con los métodos, técnicas y procedimientos que cada una requiera y así obtener resultados.
Los resultados de la batería se los integra a los signos y síntomas obtenidos de las entrevistas y se elabora un resumen psicológico en la que también debe constar los datos de la observación clínica adquiridos durante todo el proceso psicodiagnóstico. Información importante que nos permite elaborar síndromes o apreciaciones psicodiagnósticas varias, facilitándonos criterios Psicodiagnóstico para sí es del caso realizar pruebas complementarias de otras prácticas profesionales afines.
Una vez derivado el examinado a interconsultas, generalmente médicas y pedagógicas, con los resultados obtenidos establecemos el psicodiagnóstico diferencial, el psicodiagnóstico definitivo, pronóstico y psicoterapia aplicarse.
Finalmente se realiza la entrevista de devolución en la que se informa al paciente (s) o familiares el resultado del proceso psicodiagnóstico y se establece de mutuo acuerdo la alianza psicoterapéutica o proceso psicoterapéutico.
Como se puede deducir, el proceso psicodiagnóstico necesita utilizar un encuadre a lo largo del mismo, lo que significa mantener constante ciertas variables que intervienen en la relación bipersonal, familiar o grupal, como son por ejemplo: La aclaración de roles respectivos es decir, la naturaleza y límite de la función de cada parte integrante que el proceso desempeña.
Por otra parte los lugares donde se realizarán las entrevistas, horario y duración del proceso; el mismo que debe ser planteado en términos aproximados, tratando de no plantear una duración corta ni muy prolongada.
Finalmente, las fechas y horarios de las sesiones de trabajo, si se trata de una consulta privada o de una institución. Es importante tener en cuenta, que el encuadre no se puede definir con absoluta precisión, porque el contenido y el modo de formularlos dependen en muchos aspectos, de las características del paciente y sus padres.
Por lo tanto es preferible y recomendable aclarar desde el comienzo los elementos imprescindibles del encuadre dejando para el final de la primera entrevista los restantes.
Percibir cuál es el encuadre justo para el caso y poder luego mantenerlo es un elemento muy importante como difícil de aprender en la tarea psicodiagnóstica, por lo tanto que es conveniente mantener una actitud permeable y abierta para no establecer condiciones que luego resultan insostenibles, sea por falta de límites o límites muy rígidos, alargamiento del proceso, planteo confuso de su tarea etc., todo esto perjudica especialmente al paciente.
La plasticidad, la discriminación, la empatía, ética profesional son condiciones muy importantes y válidas cuando los utiliza a los fines de ubicarse frente al caso con acierto y dar el encuadre apropiado.
Autor: Franklin Andrade Fabre
(Tesis de grado de Psicólogo Clínico)
Año: 1982
Tomado de:
Revista Universidad de Guayaquil Nº 4 (62)
Oct. – Dic. 1985
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Formas etiològicas de los trastornos Psìquicos y las enfermedades mentales.
La dimensión profunda de lo normal y lo patológico, es referido a todo proceso y se da en todo tipo de estructura social. De ahí que la explicación de lo patológico debe darse en el marco de las relaciones sociales de producción y la estructuración de éstas, en el desarrollo de las fuerzas productivas en un período histórico y social determinado.
Los trastornos psíquicos en el sujeto son percibidos en un primer instante, en la entrevista, en la observación clínica de los signos, síntomas, que para fines de diagnóstico, terapia y prevención se los integra como síndromes y entidades nosográficas en las prácticas profesionales.
Prácticas profesionales que se expresan en las relaciones sociales de producción, las que posibilitan la relación psicólogo-paciente y por consiguiente, el proceso psicodiagnóstico que señala y explica el trastorno psíquico o la enfermedad mental.
Proceso psicodiagnóstico que busca no sólo establecer el conjunto de signos, síntomas, sino que busca también penetrar en su movimiento, encontrar las formas que evidencien la causa u origen que las produce, para que una vez establecidas éstas, utilizar la psicoterapia y prevención adecuada.
Señalamos que lo normal y lo patológico hay que referirlo a la estructura social y no al sujeto, aunque sea el individuo que lo porte o lo exprese. Esto se debe a que la estructura social provoca estímulos diversos en el psiquismo y en los diversos órdenes que lo constituyen, como por ejemplo, en el proceso de articulación de lo psíquico, facilitando, impidiendo o alterando indirectamente su actividad por una parte y, por otra, interviniendo directamente en el psiquismo para desarrollarlo adecuadamente, debilitarlo o para atrofiarlo.
En consecuencia, el origen de los trastornos del psiquismo, las enfermedades mentales, serían producto de las injurias que la estructura social infiere en el hombre concreto. Injurias que al actuar en los diversos órdenes que constituyen y estructuran a la unidad bio-psico-social, modifican en unos casos el plasma germinal, provocando indirectamente alteraciones más o menos graves en el orden bio-social de lo psíquico y, en otros, directamente en el psiquismo.
En tal virtud, si consideramos que los trastornos del psiquismo, las enfermedades mentales, están remitidos a todo proceso social, no hay que reducirlas y concluirlas ni en lo estrictamente biológico, ni social, debido a que nos impiden ubicarlas en toda su dimensión. Por tanto, hay que remitirlas a los trastornos generados en y por la unidad bio-psico-social y a la ideología que entra a representar las relaciones sociales de producción de una sociedad.
Entre las formas originarias de los trastornos psíquicos y las enfermedades mentales, tenemos: injurias producidas por la estructura social, como por ejemplo, escasos recursos económicos, desocupación, consumismo, condiciones ambientales infrahumanas, etc.
Trastornos etnoculturales; como aculturación, costumbres, preceptos morales, religiosos, sexuales, normas de vida que predisponen a diferentes pueblos o grupos a determinadas afecciones mentales.
En el orden psicosocial y psíquico, las que actúan en las personas durante el transcurso de sus vidas, ejerciendo modificaciones según las circunstancias y de acuerdo al grado de sensibilidad de cada una de ellas, por ejemplo: desarticulación familiar, incomunicación social, penetración ideológica, cosificación, manipulación, traumas psíquicos, alienación social, etc.
Injurias que no sólo están presentes en lo subjetivo como una de las expresiones de lo objetivo, sino que están presentes y en correspondencia con las condiciones materiales de las distintas clases sociales, sectores, capas y estamentos sociales.
También tenemos las injurias tóxicas-infecciosas. Entre las tóxicas el alcoholismo, drogadicción o farmacodependencia y otras intoxicaciones peligrosas. Infecciosas como la tuberculosis, sífilis, rubéola, meningitis y otras que provocan fiebres intensas y prolongadas, etc., las mismas que ocasionan alteraciones en el plasma germinal dando predisposiciones diversas tales como distrofias, defectuosa organización cerebral, destrucciones neuronales que a su vez son responsables de numerosos retardos mentales, epilepsias, trastornos de la actividad nerviosa y el psiquismo.
Injurias metabólicas, endocrinas, nutricionales y traumáticas, que provocan trastornos en las órdenes de la articulación de lo psíquico. Metabólicas, tales como la diabetes y la avitaminosis. Endocrinas, las que alteran la psiquis, como el hipertiroidismo y otras disendocrinas, la disfunción neurovegetativa predisponente para el ambiente favorable para la neurosis. Deficiencias nutricionales, tales como la desnutrición, la anorexia y más alteraciones metabólicas.
Traumatismos, los que pueden incidir en cualquier etapa de la vida, desde la gestación hasta la ancianidad, como por ejemplo, accidentes que puede sufrir la madre durante el período de embarazo tales como, caídas y golpes en el vientre, placentas previas, etc., partos prematuros, atrasados, laboriosos, prolongados, anoxia al nacer, uso de fórceps, nacimiento cianótico, caídas con golpes craneoencefálicos y otros que suelen repercutir más o menos en el feto y en el individuo durante su existencia.
Finalmente, decimos que se da una constelación de formas injuriosas que actúan dialécticamente en los sujetos, provocando los trastornos psíquicos y enfermedades mentales. Formas materiales que se depositan en el sujeto a través de su proceso histórico, como manifestación de lo patológico de la estructura social.
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